Mi buen amigo Gilberto Arturo , ha hecho un pequeño y significativo cambio a un poema muy conocido de su padre, el poeta AURELIO ARTURO . Nos dice: " Con el cambió de la palabra SOL por “PAZ” en el poema original de Aurelio Arturo, queremos contribuir a que el calor del mutuo entendimiento llegue a todos los rincones de este bello país “donde el verde es de todos los colores”. Una bella experiencia lírica que quiero compartir con todos ustedes.
PAZ
Mi
amiga la paz bajó a la aldea
a
repartir su alegría entre todos,
bajó
a la aldea y en todas las casas
entró
y alegró los rostros.
Avivó
las miradas de los hombres
y
prendió sonrisas en sus labios,
y
las mujeres enhebraron hilos de luz en sus dedos
y
los niños decían palabras doradas.
La
paz se fue a los campos
y
los árboles rebrillaban y uno a uno
se
rumoraban su alegría recóndita.
Y
eran de oro las aves.
Un
joven labrador miró el azul del cielo
y
la sintió caer entre su pecho.
La
paz, mi amiga, vino sin tardanza
y
principió a ayudar al labriego.
Habían
pasado los nublados días,
y
la paz se puso a laborar el trigo.
Y
el bosque era sonoro. Y en la atmósfera
palpitaba
la luz como abeja de ritmo.
La
paz se fue sin esperar adioses
y
todos sabían que volvería a ayudarlos,
a
repartir su calor y su alegría
y
a poner mano fuerte en el trabajo.
Todos
sabían que comerían el pan bueno
de
la paz, y beberían la paz en el jugo
de
las frutas rojas, y reirían la paz generosa,
Y
que la paz ardería en sus venas.
Y
pensaron: la paz es nuestra, nuestra paz,
nuestra
madre, nuestra compañera
que
viene a nosotros como una simple obrera.
Y
se durmieron con la paz en sus sueños.
Si
yo cantara mi país un día,
mi
amiga la paz vendría a ayudarme
con
el viento dorado de los días inmensos
y
el antiguo rumor de los árboles.
Pero
ahora la paz está muy lejos,
lejos
de mi silencio y de mi mano,
el
paz está en la aldea y alegra las espigas
y
trabaja hombro a hombro con los hombres del campo.
Aurelio Arturo