Frío en el Alma
yo diría que
ésta noche
tengo frío en el
alma.
se ha venido colado
y viene a acompañarnos
a pesar de los
ruidos del pasado.
viejas
soledades viejas caricias
viejos
cansancios viejos pesares.
Como
en un rezo,
hacia
el cielo unimos las manos:
dulces
momentos se agolpan entre los trinos
de
sonidos fragmentados
danzando
pesadumbres en la garganta.
que
no conocen islas encantadas.
Todo
es bruma todo es llanto.
todo
huele a olvido todo sabe a
distancia
todo
afecto se diluye en el aire .
Invaden
los andenes invaden los altares
invaden
los jardines marchitan esperanzas.
Si
fuéramos gaviotas perderíamos las alas.
Nada
sabe a manzanas nada llega a lo alto de los templos lejanos.
Nadie
teje primaveras nadie mira a lo alto
no
hay estrellas fugaces sobre la piel ajada .
No
se corre en la brisa ni se persigue al verano
no
llegan golondrinas ni remontan los cielos
frágiles
mariposas tornasoladas.
no
se siembran rosales ni
brilla el sol de los venados.
y
sin pedir permiso nos invaden la cama
recorren
los aleros recorren los
tejados
recorren
los resquicios recorren celosías ojivales
recorren
los sillones mullidos de la casa
y
nos dejan sin sombra y, con voz agobiada
congelan
las palabras rechazan los abrazos
destruyen
los halagos vedan toda inocencia
vedan
toda alabanza y con sorna declaran:
que
el hada madrina falleció esta mañana.
Un poema realmente bello en su temática,forma y lenguaje.(Jorge Marel)
ResponderEliminarMil gracias por tu concepto, poeta Jorge Marel.
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